viernes, 16 de noviembre de 2012

TESTIMONIO VIAJE A SAN ANDRÉS


Así es viajar con nosotros a San Andrés


San Andrés Isla de encanto
Cualquier persona debería poder darse la oportunidad de visitar esta Isla tropical. Nuestro viaje comenzó durante un mes de marzo. Partimos de la ciudad de Medellín hacia el aeropuerto José María Córdoba en el municipio de Rionegro, para tomar un vuelo hacia la Isla de San Andres.
Existe la posibilidad de tomar vuelos directos, con una duración aproximada de 90 minutos y otros haciendo escala principalmente en la ciudad de Bogotá u otras ciudades principales.
El plan que adquirimos contemplaba un vuelo chárter en horas de la noche así que no hicimos escala.
Llegamos en horas de la noche y aunque hacía algo de calor estaba lloviendo. Es usual que en esta Isla llueva momentáneamente, pero cese rápido.
Cuando usted viaja de día desde el avión, puede maravillarse con una hermosa vista al mar de los siete colores.
Ya en el aeropuerto nos dirigimos a formar una fila para presentar la “Tarjeta de Turismo”. Esta tarjeta, es un impuesto que todo visitante tiene la obligación de adquirir para poder ingresar a la isla; hasta diciembre 31 de 2012 tiene un costo de Col $46.000 por persona.
Es posible y recomendable comprarla en el aeropuerto de su ciudad de origen, esto le facilita que durante el vuelo pueda diligenciar los datos solicitados en la misma y que sea más ágil el ingreso.
Luego de pasar el control de ingreso, recogimos nuestro equipaje y nos dispusimos a ubicar transporte para ir al hotel. Esté atento a los beneficios que tiene el plan que usted compra, muchos de ellos incluyen este tipo de traslados; de lo contrario destine entre Col $15.000 y Col $20.000 si el Hotel al que se dirige queda en la zona hotelera, el trayecto hasta allí son aproximadamente 15 minutos
A nuestra llegada al Hotel Blue Tone recibimos un coctel de bienvenida mientras esperamos en fila para registrarnos. Cabe anotar que en el plan que compramos, por tratarse de vuelo chárter había muchas personas que se dirigían al mismo hotel, por este motivo a veces la espera para la asignación de habitación puede ser más demorada de lo normal.
Si llegas de día, como en la gran mayoría de lugares la entrega de la habitación se hace a las 3:00p.m; si llegas antes de esa hora puedes solicitar que te guarden en el equipaje y salir a dar una vuelta mientras llega la hora.
Temprano en la mañana al despertar, desde la habitación del hotel, teníamos una vista espectacular al mar. Nos dispusimos a desayunar para ir a disfrutar de la playa. El hotel brinda alimentación tipo bufet.
Ya equipados con la ropa adecuada y una buena dosis de protector solar, quisimos dar una vuelta y caminar por toda la zona hotelera y comercial de la Isla. A lo largo de la playa, la zona es peatonal.
Existen múltiples alternativas de Hoteles para elegir. Todo depende de sus gustos, necesidades y bolsillo. Muchos de ellos frente a la playa como: Acuarium, Sunrisebeach, Lord piel, dorado, calipso, Tiuna, Portobelo y Blue Tone, otros a pocas calles Coral flower, Sea flower sol caribe centro, Decameron Isleño y algunos a las afueras, con transporte disponible para llevarlo a la zona céntrica y traerlo de vuelta cuando usted desee
Si desea ir de compras hay muchos lugares para antojarse desde dulces, juguetería, ropa y perfumes hasta electrodomésticos. Nosotros nos dimos una vuelta en día sábado y compramos algunos recuerdos, sin embargo regresamos el día domingo y algunos almacenes estaban cerrados.
En semana la mayoría hacen un receso a partir de la una y abren nuevamente a las tres de la tarde.
Hicimos varios tours, el primero de ellos fue la vuelta a la Isla, si no la tienes incluida en el plan puedes rentar un carrito de golf con un costo aproximado entre $100.000 y Col $150.000el día, también una moto automática o un taxi.
El recorrido es de 33 Km y se visitan varios lugares de la Isla, requiere que dediques buena parte del día para hacerla sin afanes. El lugar que más nos gustó fue la piscinita: Allí el mar es muy cristalino y aloja gran cantidad de peces de colores vibrantes. Es posible nadar con ellos si sabes nadar, pues te puedes tirar al agua.
La cueva de Morgan, dice la historia que allí era donde el pirata Morgan escondía los tesoros de los diferentes atracos que realizaba en medio del caribe a galeones españoles. Para entrar debes pagar aproximadamente Col $6.000, allí encuentras un pequeño museo. El sitio no es excepcional, pero los Isleños vienen trabajando para hacerlo más atractivo.
Es un lugar al cual en los últimos años le han invertido en tiempo y dinero para hacerlo más atractivo para el turista, el ingreso al museo tiene un costo de $6.000 (USD 3Aprox) y en cada charla hay una caja en donde reza "Gracias por su propina", dejar $500 (0.4 USDAprox) no es la gran cosa, pero si todos lo hacemos podemos ayudar a mantener la isla sin delicuencia alguna.
El Hoyo soplador. Allí pudimos observar el fenómeno natural producido por una serie de túneles subterráneos que comienzan en arrecifes coralinas y terminan en un solo agujero. Cuando la marea sube, una ola negra logra entrar con fuerza dentro de los túneles, arroja el aire comprimido por el hoyo, si estas de suerte lo disfrutarás
Otros sitios que visitamos fueron La loma que es el barrio más antiguo y el lugar más alto desde donde se observa toda la Isla e Iglesia Bautista que fue la primera.
Al día siguiente salimos de paseo hacia Johnny Cay y el acuario. Temprano en la mañana fuimos al muelle donde esperamos para abordar un lancha. Allí antes de embarcarte se paga un pequeño impuesto por persona. Algunas recomendaciones para este tour son: Llevar ropa que se pueda mojar, proteger tus cámaras de video o fotográficas y usar zapatos de agua por lo filoso de los corales. ¡Entre más cómodo y ligero de equipaje, mejor!
Este plan es de todo un día, primero se va al acuario un lugar en medio del mar donde el agua es cristalina y con un snorkell puedes ver peces y rayas. Es aconsejable llevar tu propio snorkell, aunque allí te pueden alquilar uno.
Desde el acuario se puede cruzar caminando con el agua hasta la cintura a Haynes cay, donde puedes comer mariscos y beber el famoso coco loco. Posteriormente partimos hacia Johnny Cay, una isla llena de palmeras y arena blanca donde puedes disfrutar de la música reggae.

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